El efecto colateral

Escuchar música que me recuerda a mi adolescencia me hace meditar mucho más en la vida y entender qué hago aquí.   Han pasado miles de cosas nuevas, muchas tristes, muchísimas felices. Este 2024 ha sido un año de darme cuenta de todo lo que me hubiese perdido estos once años de vida maravillosa que he tenido si mi primer intento de suicidio del 2013 hubiera surtido efecto, y la verdad es que la vida se ha acomodado de una manera hermosa e inesperada.  Ha sido un año lleno de contrastes lindos, servir a Dios con mi vida y en mi día a día, perseverando en esta salvación linda que Él me regaló. Dando clases a los niños, en comunicaciones, en las reuniones los martes. Compartiendo y conociendo gente nueva. Amando y aprendiendo sobre el perfecto amor con mi esposo.   Empezó el año desde una vista espectacular cerca a la torre colpatria, los días eran de muchas salidas al no tener trabajo, fotos, helado en Bruce, festival de la chicha con papá y Rog, ver luces en Madrid y ...

 Con la realidad un poco distorsionada, tratando de encontrar los retazos de la mujer que me conforma el día de hoy. Desentendiendo las nociones del amor y el desamor. Preguntándome si algo de lo que he hecho ha valido la pena, desenterrando los rincones de la muerte, meditando en el silencio las bondades de la soledad. Perdóname por querer extinguir de tu memoria los recuerdos que te formaron.

Estoy tratando de entender al menos hoy, lo inexplicablemente doloroso que está siendo para mí estar y ser en esta tierra. He buscado el silencio, he orado en mi mente, mis sueños parecen ser reflejo constante de mis mayores dolores, miedos y temores. Tengo un dolor tan intenso en mi ser, y solo puedo pensar en ti, cuando dijiste “mi alma está muy triste, hasta la muerte”, y así es como me siento. Creo que nadie más me puede entender sino solo tú, solo tú entiendes este clamor que hay en mi corazón, solo tú comprendes mi situación actual, mis emociones, trajinadas a causa de tanto sentir. Miro al hombre y veo tanto engaño, tanta avaricia, tanta mentira plagada de malas intenciones, y mi alma en suspiros. ------ Vuelvo a este blog, después de casi cuatro años de no escribir aquí; no he dejado de escribir, pero mis monólogos se han vuelto privados, me volví una diosa del Olimpo y no porque quiera, sino porque la vida me ha llevado a ser eso, la gente, la bullshit.  Ahora mismo, piens...